ADRIANO ERRIGUEL THINGS TO KNOW BEFORE YOU BUY

Adriano Erriguel Things To Know Before You Buy

Adriano Erriguel Things To Know Before You Buy

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Students like Renzo de Felice or Julien Freund have contrasted the optimistic and “Mediterranean” character of fascism—with its tendency to exalt daily life in a specific spirit of moderation—With all the somber, tragic and catastrophic character of Nazism, with its Germanic penchant for Raggnarök

El primer resultado tangible de ese cambio se ha visto en los Estados Unidos, el laboratorio principal de esa “izquierda de valores” que sigue constituyendo, hoy por hoy, el pensamiento hegemónico.

Adriano Erriguel, from Mexico, is usually a practicing lawyer and specialist and likewise a literary critic and essayist in the sphere on the history of Strategies, from a perspective that he insists on contacting “metapolitics.” His desired region of concentration is definitely the marginal intellectual currents, different and alien into the prevailing ideological consensus.

Quede claro que no hablamos aquí de fuerza bruta, sino de la fuerza moral de nuestros valores. Estos son la conclusión gloriosa de veinticinco siglos de pensamiento occidental. Como decía un zoquete en el albor del nuevo milenio:  

No quiero que se confunda el sentido del título. No voy a tratar de la familia como un agente enemigo del estado. Ni mucho menos como una organización social que haya tomado la iniciativa primera para atacar al estado.

The war brought him “experience, function, a cohort of brave younger comrades to love by using a like outside of that which is devoted to Girls, a method of fame, new and virile, and also the intoxication of living in frequent mortal Threat.” He finished the war acknowledged to be a hero as well as a heroic guy.

At first of 1919, Mussolini was merely a budding political leader, although D’Annunzio was one of the most celebrated male in Italy. Along with the war ending in a very “mutilated victory”—the Allies dismissed the territorial guarantees created to Italy—the region was plunged right into a spiral of political and social chaos.

Para salvar este escollo, los estrategas de occidente enrolan a “tontos útiles” – gente dispuesta a morir por motivos rancios como la religión y la patria – y venden la narrativa de que, en realidad, se sacrifican por nuestros valores. Un tributo de sangre para el que siempre habrá paganinis.

La última ocurrencia del ministro de Industria, Jordi Hereu, de ofrecer fondos europeos a un fabricante de coches chino, ha puesto en alerta a más de uno en Bruselas

No quiero que se confunda el sentido del título. No voy a tratar de la familia como un agente enemigo del estado. Ni mucho menos como una organización social que haya tomado la iniciativa primera para atacar al estado.

El clasismo progre encierra una gran paradoja, en cuanto es un síntoma del fin de eso que el socialismo tradicional llamaba “conciencia de Adriano Erriguel clase”. Un cambio sociológico que tiene lugar, precisamente, cuando la desigualdad es más creciente que nunca y se convierte en el mayor problema del siglo XXI. Pero en virtud del imaginario dominante – neoliberal, individualista y narcisista – los ciudadanos rechazan reconocerse en la división tradicional de clases.

Sus obras transmiten un sentimiento específicamente masculino: la nostalgia por una época más agreste hecha de hombres con los instintos alerta, solidarios con su tribu, agresivos y dispuestos a defenderse.

El caso anterior es sólo un ejemplo – anecdótico pero elocuente– del genio supremo del neoliberalismo: su capacidad camaleónica para hacerse invisible, para fundirse en el espíritu del tiempo, para adoptar una máscara de izquierdas

de nuestros valores. Que bajo tan nobles apelativos se escondan algunas realidades desagradables – islamistas radicales, talibanes, traficantes de drogas y de órganos, terroristas, milicias neonazis – no supone desdoro alguno para sus patrocinadores. El eje del Bien escribe derecho con renglones torcidos; tortuosos son los caminos de nuestros valores.

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